Lucía forma parte de un grupo de maestras que, además de dar clases on line en este año de pandemia, abrieron un merendero para atender las necesidades de 90 familias.
“Además de trabajar virtualmente, decidimos salir a ayudar a las familias que quedaron muy vulnerables en este contexto, por eso hicimos una especie de investigación para ver donde había más necesidad”, nos cuenta Lucía.
“Ya repartíamos viandas secas en comedores, pero con un grupo de amigas docentes de zona sur y yo de zona oeste, vimos que había chicos que su primera comida era el lunes al mediodía y la última, el viernes al mediodía, entonces decidimos poner en marcha un merendero”.
En total preparan 520 raciones por día y además colaboran con el resto de cosas que las personas necesitan, ya sea artículos de higiene personal y del hogar, ropa y todo lo necesario para tener una vida digna.
Durante todo este año se reunieron en Boulevard Seguí 75, pero esta convocatoria fue tan buena, que ya hay una red de docentes solidarios en todo Rosario.
Aquellas personas que deseen sumarse pueden buscar en Facebook: “docentes solidarios”, ya que en febrero regresan a las acciones sociales y van a necesitar ropa, alimentos y mercadería para poder asistir a las 90 familias que concurren a los distintos merenderos.
Lucía, Sandra, Nancy, Nicolás y Fernando, en la última acción del año para Navidad.